Las ventajas de Coverlam adquieren un sentido especial cuando hablamos de su aplicación en rehabilitaciones de establecimientos abiertos al público.
Gracias a la posibilidad de instalación sin demolición previa, se reduce considerablemente el tiempo de ejecución de la reforma del local, minimizando de esta forma el tiempo que el negocio está cerrado y, por lo tanto, el coste de oportunidad.
También se registran ahorros considerables derivados de la baja generación de escombros. En este aspecto prácticamente se eliminan los costes asociados a la gestión y eliminación de los escombros generados durante la rehabilitación.